Miles de damnificados abandonaron este fin de semanas las 496 escuelas que habían sido habilitadas como refugios temporales después de las intensas lluvias de noviembre y diciembre en Venezuela.
La ministra de Educación, Jennifer Gil, informó que el 98% de las instituciones educativas habían sido desalojadas, para dar paso al inicio de clases, en un período marcado por dos suspensiones significativas: la primera, en septiembre y en todo el país, con motivo de las elecciones parlamentarias, y la segunda en la mitad del territorio por causa de las inundaciones.
Sin embargo, no es el final de la historia para quienes perdieron sus viviendas a manos de la naturaleza. La mayoría fue traslada a otros refugios temporales, mientras se le da solución definitiva a su situación.
Unas 8.500 personas han recibido ya un techo permanente, según informó la ministra de las Comunas y Protección Social, Isis Ochoa, a través de un boletín difundido por el Ministerio de Información y Comunicaciones.
Los damnificados alcanzan la cifra de 130.000 personas, de acuerdo con las últimos datos manejados por las fuentes oficiales a finales del año pasado.
Ministerios y tiendas de campaña
En la capital, Caracas, el gobierno construye unas 23.000 viviendas, dijo Francisco Sesto, titular del recientemente creado Ministerio de Estado para la Reconstrucción Urbana de la zona capital, según indicó el mismo boletín.
"Tenemos un cronograma para cada una de las obras, a fin de poder hacer seguimiento. Cada 15 días enviamos al presidente Hugo Chávez una carpeta con todas las fichas, para que aplique, si tiene que hacerlo, el 'látigo Chávez'", dijo Sesto.
Entre las expropiaciones recientes, efectuadas con el objeto de "recuperar terrenos" para urbanismo, se cuentan varios estacionamientos en el centro de la ciudad y un lote perteneciente a la empresa de alimentos Polar -con la que Chávez ha mantenido una confrontación de larga data-, que estaba destinada a la ampliación de un centro de adiestramiento en nutrición infantil.
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